El Stadium sale vivo de Las Tolvas

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Los blanquiazules sumaron un punto en un partido de mucho contacto y pocas ocasiones, en el que poco más pudieron hacer para no regresar de vacío.

El equipo dirigido por Lucho Valera visitaba en la mañana de ayer el campo de Las Tolvas, donde se medirían al Real Titánico en un partido de altos vuelos de la Regional Preferente. En un lado los avilesinos, que iniciaban la jornada como líderes de la tabla. En el otro los de Laviana, con cinco victorias en sus últimos cinco partidos. Todo lo necesario para vivir un gran encuentro, aunque por desgracia los aficionados que se dieron cita no pudieron disfrutarlo en exceso.

El partido comenzaba de igual a igual, con ambos conjuntos tratando de ganar terreno en el centro del campo. Nada más comenzar, los rojiblancos disponían de su primera ocasión a balón parado, con una falta en la frontal del área que se fue por encima del travesaño.

Desde entonces pasaría bastante antes de poder presenciar otra llegada, reinando la igualdad. Sería en el minuto veinte, en un remate de cabeza de Marcos, algo bombeado, que obligaba al portero Roberto a intervenir con una gran mano. A renglón seguido, el mismo portero sería protagonista en una contra visitante para evitar el disparo de Ureta. Y de nuevo una contra generada a partir de esa jugada llevaría el peligro de área a área, pero el disparo de los locales se fue directamente fuera sin que Juanes tuviese que actuar.

Poco más se vería antes del descanso, en un partido en el que la igualdad y el centrocampismo vería su protagonismo en detrimento del colegiado. Cumplida la primera media hora, el capitán Marcos era el primero en ver la cartulina amarilla, tras una disputa de balón. Los locales buscaron su gol con una jugada de estrategia, pero el disparo se iba fuera. Antes del descanso, otros dos jugadores blanquiazules verían la amonestación de un Bergareche Solana que quiso zanjar las disputas a golpe de tarjeta, aunque aplicando para ello un criterio que generó no pocas quejas en la grada.

Y justo antes de retirarse a vestuarios, llegó el gol. Una falta botada por Miguel Boj al segundo palo, era cabeceada por Marcos hacia el otro extremo del área pequeña. Samu, también de cabeza, remataba superando al portero por arriba para subir el primer gol de la mañana al marcador.

Nada más regresar de vestuarios, los locales lanzaban un saque de esquina ante el que Juanes salía de puños para despejar el balón. Ante la sorpresa de visitantes y locales y sin haber existido quejas de por medio, el colegiado señalaba convencido el punto de penalti. El rojiblanco Jairo lo transformaba, devolviendo las tablas a un marcador que no se movería más. La acción, también supondría una nueva amonestación, la de Juanes, por protestar la acción.

Llegados a este punto, Lucho Valera decidía mover a los suyos dando entrada a Wisi y Litos por Ureta y Orselli. Nada más acceder al terreno de juego, Wisi sumaba una más al contador de tarjetas, al cometer falta en su primera intervención. También el técnico sería amonestado poco después por protestar una decisión de un trío arbitral que no tuvo su mejor día.

En lo deportivo, los locales dominaron la segunda mitad hasta los minutos finales, aunque con poco juego y menos ocasiones, provocadas por las continuas interrupciones. Cumplida la hora de juego, los locales tenían su siguiente oportunidad en una falta directa que se fue por encima del travesaño. Continuando esta acción, los avilesinos lanzaban una contra que Wisi finalizaba con un disparo en el que no encontró portería. Y sin tiempo que perder, de nuevo los avilesinos a balón parado, remataban una falta pero sin acierto.

En esta última acción, un jugador local se quedaba tendido en el suelo y necesitaba ser atendido, lo que pausó el juego durante varios minutos al poder haber sido algo grave. Tratando de defender el centro, el jugador había chocado con su guardameta y caía al suelo en una mala posición. Finalmente, todo quedaba en un susto aunque el jugador era sustituido minutos después.

En los minutos finales, los avilesinos asediaron la portería rival en busca de decantar el empate a su favor, aunque no sería posible. Samu trató de emular la acción de su gol, rematando un balón de forma muy similar, pero en esta ocasión el portero estaba en buena posición para evitarlo.

Casi al término de un tiempo de descuento poco usual, los avilesinos pudieron adelantarse en una acción a balón parado. El esférico quedaba muerto casi en boca de gol y en medio de una gran barullo, en el que los locales trataban de despejar mientras los atacantes intentaban hacer que entrase en la meta. La acción terminaba con una falta pitada y encontronazos varios entre jugadores de ambos conjuntos, donde Josu fue expulsado por impedir levantarse al portero en la acción anterior y le fue propinado un golpe en la cara, aunque esto no conllevó sanción alguna. Con esta acción, se llegó al final.

Un partido finalizado con justo reparto de puntos tras lo visto en el césped, en el que ambos equipos fueron superiores en diferentes tramos del encuentro pero sin imponerse claramente al rival. Ambos mostraron una buena versión de si mismos pese a no estar acertados de cara a gol. Al margen de lo futbolístico, los avilesinos regresaron con seis amonestaciones, una expulsión y un penalti que no dejaron nada conformes a los numerosos aficionados desplazados desde Avilés para ver jugar a los suyos.

Sin más, toca ya de pensar en el próximo rival, que será el CD Vallobín. Los ovetenses visitarán el Muro de Zaro el próximo domingo a partir de las 11.45 horas para medirse en el feudo del Avilés Stadium. Otro encuentro de altos vuelos.